La competitividad empresarial y las exportaciones están cada vez más vinculados a la integración de los países en las cadenas mundiales de producción y la voluntad de abrir los mercados a mayores importaciones, según datos preliminares de comercio internacional publicados por la OCDE y la OMC.
La OECD WTO Trade in Value-Added Initiative, Tiva, rompe con las mediciones convencionales del comercio, las cuales registran el valor final de los flujos de bienes y servicios cada vez que estos cruzan las fronteras. Lo que se busca en su lugar, es analizar el valor agregado por un país en la producción de cualquier bien o servicio que se exporta. Esto entrega una visión más completa de las relaciones comerciales entre las naciones.
"La capacidad de los países para vender al mundo depende de su capacidad y disposición para comprar del resto del mundo", dijo el Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, durante el lanzamiento de la nueva base de datos en Paris junto con el Director General de la OMC, Pascal Lamy, el Comisario Comercio de la UE, Karel De Gucht, y el Ministro de Comercio de Nueva Zelanda, Tim Groser.
"El trabajo de ambas instituciones nos permite ver más claramente que nunca cómo el bloqueo a las importaciones daña la competitividad propia de un país. Las negociaciones comerciales tienen que ponerse al día con estas nuevas realidades, y los países deben aplicar políticas que ayuden a sus empresas a gestionar mejor su lugar en las cadenas internacionales de valor, explica Ana Novik, Directora de Asuntos Económicos Multilaterales de la Direcon.
La primera entrega de la base de datos de la OCDE y la OMC ofrece nuevas perspectivas sobre cómo las cadenas globales de valor impactan las relaciones comerciales y la actividad empresarial. Entre las principales conclusiones destacan las siguientes:
El superávit comercial bilateral de China con Estados Unidos se reduce en un 25% en términos de valor agregado, lo que refleja el alto nivel de contenido de origen extranjero en las exportaciones chinas.
Una tercera parte del valor total de los vehículos de motor exportados de Alemania proviene en realidad de otros países, mientras que casi el 40% del valor total de las exportaciones chinas de productos electrónicos proceden de fuentes extranjeras.
Si bien los datos comerciales convencionales sugieren que servicios representan menos de una cuarta parte del comercio total, sobre una base de valor añadido, el comercio de servicios alcanza un promedio del 50% de las exportaciones de los países de la OCDE y muy por encima de eso, se encuentran los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Alemania e Italia -, en gran parte porque los servicios dan un significativo valor añadido a la producción manufacturera.
Los excedentes comerciales bilaterales de los mayores países exportadores de commodities (como Australia, Brasil y Canadá) con sus principales socios comerciales disminuyen sobre la base del valor agregado, ya que sus materias primas son procesadas posteriormente por los socios comerciales y luego reexportados Esto pone en relieve que estos países pueden "avanzar " en la cadena de valor.
Los nuevos indicadores del comercio basados en el valor agregado derivan de las tablas mundiales de input-output, desarrolladas por la OCDE, que describen las interacciones entre las industrias y los consumidores de 58 economías, lo que refleja el 95% de la producción mundial. Se puede acceder a la base de datos a través de OECD's Statistics Portal , bajo "International Trade and Balance of Payments" a través del WTO's data portal.
Para obtener más información sobre la metodología de la base de datos TIVA, los indicadores, las notas y planes futuros, vea: www.oecd.org/trade/valueadded.