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Héctor Casanueva, embajador de Chile ante la OMC; Andrés Rebolledo, Director Direcon; Anne Leer, directora general adjunta OMPI sector Cultura e Industrias Creativas y Mario Matus, director general adjunto OMPI programas de Desarrollo.[/caption]
Ginebra, 22 de junio de 2015. Chile se convirtió en el primer país latinoamericano, y en el séptimo en el mundo, en ratificar el Tratado de Beijing sobre interpretaciones y ejecuciones audiovisuales, al cumplir hoy con un paso clave en Ginebra, Suiza: depositar el instrumento de ratificación en la sede de la
Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI). El Tratado fue aprobado por el Congreso chileno en marzo de este año.
Dicho tratado, que fue suscrito en Beijing (China), en 2012, constituye un avance fundamental que permite incorporar a los artistas, intérpretes o ejecutantes de obras audiovisuales al sistema internacional de la propiedad intelectual, dando mayor firmeza a sus derechos patrimoniales y morales.
“Nos parece que es una decisión muy importante pues este tratado reafirma este tipo de derechos de los artistas, permitiéndoles exigir que sean identificados como tales, así como también evitar la mutilación de sus interpretaciones o ejecuciones y además, salvaguardar los derechos contra la utilización no autorizada de sus obras en medios audiovisuales”, destacó el
director de la Direcon, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Andrés Rebolledo, quien encabezó por parte de Chile la ceremonia realizada hoy en Ginebra.
Recibieron este Tratado la directora general adjunta, responsable del sector de Cultura e Industrias Creativas, Anne Leer, y el director general adjunto responsable de los programas relacionados con el Desarrollo de la OMPI, Mario Matus. Anne Leer destacó que con la entrega del documento Chile “está tomando el liderazgo en la región”, y que este Tratado es “muy importante para los artistas locales y para la industria audiovisual”. Mario Matus resaltó que ahora “el país está listo para comenzar a implementarlo”.
Rebolledo explicó que dicho Tratado establece un marco jurídico internacional más claro que, en este caso, permitirá a los artistas chilenos consolidar su posición en la industria audiovisual, concediéndoles protección en el entorno digital y contribuirá a salvaguardar los derechos de los beneficiarios contra la utilización no autorizada de sus interpretaciones o ejecuciones en medios audiovisuales, tales como el cine y la televisión.
Una vez que entre en vigencia esta norma, por ejemplo, un actor chileno tendrá la certeza de que sus actuaciones no podrán ser utilizadas a nivel nacional o internacional en medios audiovisuales como el cine y la televisión sin que se cuente con su debida autorización y tendrá la posibilidad de obtener una participación en los ingresos internacionales de las producciones en las que ejerce su labor.
El
Tratado de Beijing que ha sido firmado por 74 países, y entrará en vigor una vez que 30 suscriptores del acuerdo hayan depositado sus instrumentos de ratificación ante la OMPI, constituyó el primer instrumento sustantivo en materia de propiedad intelectual acordado desde hace más de 18 años en el seno de esa organización. Hasta ahora, 6 países (Botswana, China, Japón, Eslovaquia, Siria, y Emiratos Árabes Unidos) habían cumplido con dicho trámite.
Héctor Casanueva, embajador de Chile ante la OMC; Andrés Rebolledo, Director Direcon; Anne Leer, directora general adjunta OMPI sector Cultura e Industrias Creativas y Mario Matus, director general adjunto OMPI programas de Desarrollo.[/caption]
Ginebra, 22 de junio de 2015. Chile se convirtió en el primer país latinoamericano, y en el séptimo en el mundo, en ratificar el Tratado de Beijing sobre interpretaciones y ejecuciones audiovisuales, al cumplir hoy con un paso clave en Ginebra, Suiza: depositar el instrumento de ratificación en la sede de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI). El Tratado fue aprobado por el Congreso chileno en marzo de este año.
Dicho tratado, que fue suscrito en Beijing (China), en 2012, constituye un avance fundamental que permite incorporar a los artistas, intérpretes o ejecutantes de obras audiovisuales al sistema internacional de la propiedad intelectual, dando mayor firmeza a sus derechos patrimoniales y morales.
“Nos parece que es una decisión muy importante pues este tratado reafirma este tipo de derechos de los artistas, permitiéndoles exigir que sean identificados como tales, así como también evitar la mutilación de sus interpretaciones o ejecuciones y además, salvaguardar los derechos contra la utilización no autorizada de sus obras en medios audiovisuales”, destacó el director de la Direcon, del Ministerio de Relaciones Exteriores, Andrés Rebolledo, quien encabezó por parte de Chile la ceremonia realizada hoy en Ginebra.
Recibieron este Tratado la directora general adjunta, responsable del sector de Cultura e Industrias Creativas, Anne Leer, y el director general adjunto responsable de los programas relacionados con el Desarrollo de la OMPI, Mario Matus. Anne Leer destacó que con la entrega del documento Chile “está tomando el liderazgo en la región”, y que este Tratado es “muy importante para los artistas locales y para la industria audiovisual”. Mario Matus resaltó que ahora “el país está listo para comenzar a implementarlo”.
Rebolledo explicó que dicho Tratado establece un marco jurídico internacional más claro que, en este caso, permitirá a los artistas chilenos consolidar su posición en la industria audiovisual, concediéndoles protección en el entorno digital y contribuirá a salvaguardar los derechos de los beneficiarios contra la utilización no autorizada de sus interpretaciones o ejecuciones en medios audiovisuales, tales como el cine y la televisión.
Una vez que entre en vigencia esta norma, por ejemplo, un actor chileno tendrá la certeza de que sus actuaciones no podrán ser utilizadas a nivel nacional o internacional en medios audiovisuales como el cine y la televisión sin que se cuente con su debida autorización y tendrá la posibilidad de obtener una participación en los ingresos internacionales de las producciones en las que ejerce su labor.
El Tratado de Beijing que ha sido firmado por 74 países, y entrará en vigor una vez que 30 suscriptores del acuerdo hayan depositado sus instrumentos de ratificación ante la OMPI, constituyó el primer instrumento sustantivo en materia de propiedad intelectual acordado desde hace más de 18 años en el seno de esa organización. Hasta ahora, 6 países (Botswana, China, Japón, Eslovaquia, Siria, y Emiratos Árabes Unidos) habían cumplido con dicho trámite.
