OCDE: reformas en el sector de servicios repercutirían en crecimiento de la economía global
25/07/2017
La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) lanzó en junio pasado el “Estudio sobre las políticas comerciales en servicios y la economía global”, que viene a sintetizar el impacto de las políticas sobre servicios y cómo afectan a las importaciones y exportaciones de éstos.
Este estudio fue realizado en el marco del trabajo realizado por el Comité de Comercio, el que, entre otras cosas, fue el encargado de confeccionar el Índice sobre las Restricciones de Servicios (STRI).
Dicho estudio muestra cómo ciertas reformas relacionadas con el comercio de servicios pueden fortalecer las cadenas globales de valor, mejorar el desempeño económico y, además, beneficiar a los consumidores a nivel mundial. Da cuenta, además, que la competitividad de la industria manufacturera depende del acceso a ciertos servicios a precios convenientes y destaca la relación existente entre un ambiente regulatorio transparente y favorable, con la atracción de inversión extranjera directa.
Los servicios generan más de dos tercios del PIB mundial, es el sector que da más empleo y es que el crea más trabajos nuevos a nivel mundial. La base de datos de la OCDE-OMC “Trade in Value Added” – Comercio de valor agregado – da cuenta que el sector servicios representa más del 50% del valor agregado en las exportaciones brutas, y sobre el 30% del valor agregado en la exportación de bienes manufacturados. Sin embargo, el comercio de servicios continúa estando sujeto a restricciones en sectores como telecomunicaciones, servicios financieros, transporte, logística y servicios profesionales, según el reporte.
El mismo estudio señala que el costo del comercio de servicios y las barreras a la inversión continúan siendo altos, excediendo ampliamente la tarifa promedio de los aranceles, en materia de comercio de bienes. Los consumidores y las empresas estarían pagando el costo de estas restricciones. Es más, en sectores como transporte, logística y construcción, se estima que los precios son un 20% superior a lo que corresponderían en caso de no existir tales restricciones, alcanzando un 80% en algunos países más restrictivos que la media. Finalmente, dicho sobre precio es traspasado a las empresas manufactureras y, finalmente, a los consumidores.
Otro factor que, según el estudio, crearía costos adicionales para los exportadores de servicios que buscan penetrar en múltiples mercados consistiría en la falta de una coherencia regulatoria. Las Pequeñas y Medianas Empresas se beneficiarían de mercados de servicios más abiertos que cuenten con una regulación común, o al menos similar. Las Pymes comúnmente sostienen que no cuentan con la capacidad para identificar los requerimientos regulatorios de cada mercado, adaptar los métodos de producción ni cumplir con los requisitos regulatorios. Concluye que reducir el costo de la entrada de mercados ayudaría a mejorar la inclusividad del comercio de servicios al permitir que más Pymes aprovechen las oportunidades globales.
Finalmente, el estudio concluye que los países deberían adoptar reformas orientadas a reformar la regulación y coordinar la política de comercio de servicios, mediante:
La identificación y eliminación de ciertas restricciones que discriminan la entrada de proveedores extranjeros y barreras para el movimiento de profesionales.
La adaptación de reformas estratégicas en materia de servicios, inversiones y políticas de competencia para facilitar el comercio de servicios.
La identificación de cuellos de botella en materia de transporte y logística para efectos de reducir los costos del comercio.