Santiago, 14 de febrero de 2024. Este miércoles entra en vigor el Acuerdo Económico - Comercial (AEC) que moderniza las relaciones entre Chile y Paraguay. Las negociaciones para este acuerdo que fueron lideradas por los equipos de la Subrei, comenzaron en 2020 y se enfocaron en complementar y modernizar la relación bilateral, regida por el ACE35 Chile-Mercosur; y, tras cuatro rondas, culminaron exitosamente con su suscripción el 1° de diciembre de 2021.
Luego de 27 años desde la suscripción por parte de Chile del ACE N°35, se complementó dicho instrumento, incorporando nuevas disciplinas, con enfoque inclusivo y sostenible, lo cual se concretó con el AEC Chile-Paraguay.
Este acuerdo cierra un importante ciclo de modernización de acuerdos comerciales suscritos por Chile con cada uno de los países fundadores del Mercosur (Uruguay en 2016, Argentina en 2017, Brasil en 2018 y Paraguay en 2021).
El acuerdo consta de un Preámbulo y 19 capítulos, abarcando materias de última generación que modernizan la relación bilateral, hasta ahora centrada en la liberalización arancelaria.
Las nuevas disciplinas incluyen: Comercio Electrónico, Comercio de Servicios, Facilitación de Comercio, Política de Competencia, Obstáculos Técnicos al Comercio, Buenas Prácticas Regulatorias (BPR), Medidas Sanitarias y Fitosanitarias, Cadenas Regionales y Globales de Valor (CRGV), Emprendedores, Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, Comercio y Género, Comercio y Medio Ambiente, Comercio y Asuntos Laborales; y Transparencia y Anticorrupción.
Así, el AEC busca entre otros objetivos, una mayor y mejor inserción de las empresas chilenas y paraguayas en las CRGV y la identificación de oportunidades de inversión, abriendo alternativas de diversificación a nuestra matriz productiva, apuntando a un mayor valor agregado de las exportaciones e impulsando los servicios, que generan más empleo e incorporen valiosos conocimientos desarrollados tanto en Chile como en Paraguay.
Esta es la primera vez que Paraguay incorpora en un acuerdo comercial compromisos en materias tales como: Comercio Electrónico, Buenas Prácticas Regulatorias, Cadenas Regionales y Globales de Valor, Género, Medio ambiente y Asuntos Laborales.
Este acuerdo otorgará mayor certeza jurídica a los exportadores e importadores de ambos países, se trata un importante elemento de decisión para empresas interesadas en invertir en Chile o en Paraguay, brindando mayor transparencia y seguridad a los flujos bilaterales, tanto en bienes y servicios.
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